martes, 23 de febrero de 2016

Uruguay a la cabeza de la región en facilidad para hacer negocios.

Argentina ocupa el último lugar en el listado de TMF 
Qué tan fácil o complicado es para una empresa operar en una determinada geografía. Esa es la pregunta para cuya respuesta una compañía internacional elaboró un ranking, en el que Uruguay se coronó como el país sudamericano "menos complejo" para hacer negocios. El país obtuvo el puesto 55 dentro de las 95 naciones incluidas dentro del índice –a mayor número, menos complejidad–. 

De acuerdo a la última edición del Índice Global de Complejidad 2015, realizado por la firma TMF Group –referente a nivel mundial en materia de consultoría contable y secretariado corporativo–, a Uruguay le siguen en esta región del mundo Ecuador (40), Chile (37) y Paraguay (29). 

Este es el grupo de países sudamericanas que tuvo un mejor desempeño en esta última edición. 

El objetivo de la elaboración de este listado es dar cuenta de qué tan complejo es cada uno de ellos para hacer negocios desde la óptica regulatoria y de cumplimiento. 

Dentro del listado de países que, por el contrario, obtuvieron una mala nota, un vecino se llevó el nada codiciado primer puesto. Por tercer año consecutivo Argentina consiguió la cocarda y se alzó con el título de país más compleja para realizar negocios. Le siguieron Indonesia, en el segundo lugar, y Colombia, en el tercero. 

De hecho, dentro de la región, además de Argentina y Colombia, México, Bolivia y Brasil se encuentran entre los primeros 10 peores lugares del ranking.

En el extremo opuesto del ranking, Irlanda (95) se consagró como la nación donde es más fácil hacer negocios. 

Reducción de la burocracia


La complejidad de cualquier país no es afectada de manera necesaria por el lugar que ocupa en el mapa, de acuerdo a lo que explicó a El Observador el director Sudamérica para TMF, Roberto Scrimieri. 
"Sin embargo, está muy influenciada por el sistema legal en vigor, lo que determina cómo las empresas serán manejadas y reguladas por las autoridades localmente y qué tan hábiles serán estas para mantener un ambiente de gobernanza corporativa estable", indicó el ejecutivo. 

En relación a en qué puntos los países deben avanzar para escalar posiciones en el ranking, Scrimieri dijo que "un factor que siempre debe buscarse mejorar, y que aplica para cualquier jurisdicción, es la necesidad de reducir la burocracia para que el país sea más atractivo a la inversión extranjera". 

A la hora de enumerar los elementos positivos de Uruguay –y que explican en parte por qué logró este lugar en la lista–, Scrimieri indicó varias razones. 

Su ubicación geográfica, en primer lugar, que "históricamente ha posicionado al país como puerto de entrada y salida del comercio a la región y al mundo". Añadió también que Uruguay se está posicionando como una "ubicación muy interesante" en el terreno del comercio de servicios. 

Asimismo, sostuvo que el país "mantiene una trayectoria y reputación de estabilidad política, social y económica".

Por otra parte, mencionó los "regímenes atractivos" con los que cuenta Uruguay y que allanan el camino para el desembarco de inversiones. En este punto hizo referencia a la Ley de inversiones y a la de Zonas Francas. 

En último término, Scrimieri también remarcó como ejemplo de innovación, la posibilidad de que las empresas emitan de manera electrónica los recibos de sueldo de sus empleados. 

Sistema financiero también tendrá "su Uber" este año.

Conectará a ahorristas con personas necesitadas de capital.

A pocos meses de la llegada al país de Uber, una iniciativa similar a la aplicación de transporte privado se apresta a comenzar a operar en la plaza financiera. El emprendimiento conectará a través de la web a ahorristas con personas que necesiten capitales sin la intervención de instituciones bancarias, financieras o casas de créditos.
"Inversionate", se presenta como "una nueva forma de colaborar que beneficia a personas con ahorros y a personas en busca de ellos". La plataforma añade que con ella se podrá invertir "cuánto quieras, cuándo quieras, a la tasa y plazo que quieras y en quién vos quieras. O solicitar un préstamo a la tasa y plazo que prefieras". Por eso, es que quienes están en conocimiento del proyecto lo definen como "el Uber del mercado financiero".
Uno de sus creadores, Dani Vianna, explicó a El País que el modelo de negocio se encuentra en etapa de validación —que se extenderá por un mes aproximadamente— y se espera que la herramienta esté operativa dentro de seis meses.
"Es juntar gente que tiene con gente que necesita", definió a "Inversionate".
En la plataforma web habrá un listado de personas que necesitan capital para diferentes emprendimientos. El equipo de "Inversionate" hará un análisis de ellos para establecer el riesgo que significará para los ahorristas participar de la inversión. A su vez, los ahorristas tendrán los fondos que deseen en "Inversionate" y podrán acceder a las solicitudes de créditos. Cuando una de ellas o varias lo convenzan le transferirán el monto que quieran.
Al momento de completar el monto total requerido, los fondos se pondrán a disposición del solicitante. "Allí, el cliente va a pagar la cuota en Inversionate y nosotros lo que hacemos es repartir las ganancias. El reintegro al inversor depende del riesgo de la persona en la que va a invertir. Con una persona de poco riesgo se va a tener un retorno más bajo que en otra de riesgo más alto", explicó Vianna. "Para que realmente sea provechoso, la idea es que se reinvierta el capital inicial más la ganancia. En ese caso, se podría llegar a tasas de retorno superiores a 50% en un año", añadió. "Inversionate" cobrará una comisión de 5% en cada emprendimiento.
Vianna informó que, en principio, la plataforma estará abierta a diferentes planes de inversión, aunque se pondrá énfasis en los préstamos universitarios.
"No solamente carreras universitarias; pueden ser posgrados, maestrías. Pero no estamos cerrados solamente a eso; hay muchas otras posibilidades", expresó.
La plataforma se moverá dentro del mercado de las microfinanzas y por las regulaciones vigentes no se puede pasar de un monto máximo de $ 200.000 por inversión.
"Lo de Uber no es un invento nuestro. Fue algo que se dio normalmente en las reuniones que tuvimos donde la gente nos comparaba con Uber; aseguradoras, empresas de recuperación de activos, escribanos y contadores", señaló Vianna.
"Inversionate" fue uno de los proyectos ganadores de "Emprendetón", un concurso organizado por CPA Innovation, junto a la Universidad ORT y Fundación da Vinci, que finalizó la semana pasada.
El socio de CPA Ferrere Bruno Gili dijo a El País que el proyecto tiene varios aspectos interesantes. Uno de ellos es que plantea una alternativa para invertir al ahorrista. "El mercado uruguayo ofrece pocas alternativas y cualquier innovación que lo mejore es interesante", afirmó.
"Por otro lado, está dentro de una economía digital que si tiene éxito podría bajar bastante los costos transaccionales del sistema", agregó.
"También es interesante que conecten directamente la oferta y la demanda ente el ahorro y la necesidad de préstamos a través de un servicio en web. Tiene una lógica parecida a Uber", expresó Gili.

lunes, 15 de febrero de 2016

Invertir en ladrillos en EE.UU. opción que crece en Uruguay.

También entre los argentinos, pero se perderá el “anonimato”, un atractivo.

Se dio oleada de compradores del extranjero en el sector inmobiliario de EE.UU. Foto: Reuters
14 feb 2016
En los últimos años creció la demanda de los uruguayos por comprar inmuebles en Estados Unidos como inversión, también de los argentinos que empezaron a preferir aquel país a Punta del Este por menores costos y el siempre buscado anonimato ante la temida Agencia Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Intermediarios del mercado inmobiliario que operan en Uruguay y asesoran a clientes para invertir en ese sector en Estados Unidos, atribuyeron el fenómeno a la seguridad de la inversión, la estabilidad del precio de los inmuebles en ese país, y la buena renta que ofrecen en un clima de volatilidad económica a nivel local e internacional.
La responsable comercial para el Cono Sur de Prodigy Network (una de las plataformas de inversión colectiva más grandes del mundo), María Noel Hernández, dijo a El País que "a nosotros nos está yendo muy bien y tenemos muchísima demanda". Explicó que la firma ofrece inversiones en Manhattan a través de la modalidad de crowdfunding (cooperación colectiva), que recoge el dinero de varios clientes y los vuelca a un proyecto inmobiliario de gran valor que luego genera beneficios. "Con inversiones desde US$ 50.000 se fundan proyectos de US$ 200 millones, lo novedoso es que damos acceso a cosas mayoristas a inversores minoristas", detalló.
Mientras que la directora de Glanay Negocios Inmobiliarios, Aixa Barbero, indicó que "en relación a otros años ha aumentado la demanda" de inversiones en Estados Unidos, tanto a través de fondos de cooperación como en la compra directa de inmuebles. Señaló que el negocio apunta a "personas de clase media alta o alta", y en especial a empresarios de rubros comerciales o agrarios.
"El porcentaje de renta de este tipo de negocios es alto, por eso cada vez se vuelcan más los inversores hacia Estados Unidos", indicó Barbero.
En el caso de los argentinos, ya desde 2013 se inició una oleada que dejó de invertir en inmuebles en Punta del Este y la costa de Montevideo para preferir Estados Unidos. En aquel momento, en Carolina del Sur, Carolina del Norte o Massachusetts, compraban a "US$ 800 o US$ 600 el metro cuadrado", mientras en Uruguay debían desembolsar "entre US$ 3.000 y US$ 4.000", había dicho a El País el principal de la gerenciadora de patrimonios FDI, Mariano Sardáns.
Pero, esto empieza a cambiar por una nueva medida del gobierno estadounidense que está destinada a "identificar a los muchos extranjeros non-sanctos (corruptos, traficantes de drogas y armas y otros capitales originados de delitos complejos) que se encuentran entre los inversores que compraron inmuebles, aprovechando el anonimato otorgado por las sociedades offshore (dueña de una sociedad local que a su vez compra el/los inmueble/s)", indicó Sardáns.
Esto impacta sobre todo en los argentinos, que quieren evitar a su fisco mediante el anonimato. De hecho, Uruguay tiene un acuerdo de intercambio de información tributaria con Argentina, pero con ciertos resguardos (ver aparte). Según Sardáns "en EE.UU., el Fly-to-Real-Estate (vuelo hacia el sector inmobiliario) fue más exacerbado. Por un lado porque fue el único país que por ahora no firmó el acuerdo multilateral de intercambio de información automática (que sellaron 100 países, Uruguay incluido), decisión que lo convirtió actualmente en el principal centro offshore". Y "por otro lado, porque a partir del 1º de enero del 2015, comenzó en los EE.UU. a ser obligatoria la identificación ante el IRS (el fisco) del último beneficiario de las cuentas bancarias que estaban a nombre de sociedades offshore", agregó.
"Esto generó que muchos inversores se deshicieran de sus cuentas bancarias (y activos financieros) en dicho país y compraran inmuebles, creando una demanda irracional y una potencial burbuja en los precios de varias ciudades y segmentos", explicó Sardáns.
Desde la oficina en Uruguay de Prodigy Network se maneja también la operativa de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile y Paraguay. Las ventas se realizan a través de brokers inmobiliarios o de la banca privada mediante cuentas de inversión. Hernández subrayó que en ambos casos se realizan los trámites legales para "justificar los orígenes de los fondos". En el mismo sentido, Barbero destacó los controles que se realizan en Estados Unidos y mencionó que se exige a los compradores abrir una cuenta bancaria y registrar la propiedad.
La responsable regional de Prodigy Network señaló que "ofrecemos un activo que se comporta muy bien en un escenario de crisis y es un refugio de valor". En este sentido, informó que se incrementó la demanda debido a la volatilidad que vienen experimentando los mercados globales.
Sardáns dijo que "el negocio se basó en el incremento de los precios producto de la excesiva demanda de los inversores", peo eso puede cambiar.

EL acuerdo de intercambio de datos con Argentina.

Cuando Uruguay firmó con Argentina un acuerdo de intercambio de información tributaria en 2013, los operadores inmobiliarios de Punta del Esta pusieron el grito en el cielo porque entendían que era un golpe directo a la inversión de argentinos en el sector. En los años siguientes cayó la compraventa de inmuebles por parte de argentinos en Uruguay, pero en eso influyó el cepo cambiario y la opción más rentable que ofrecía Estados Unidos (que es cierto, también ofrecía el anonimato tan buscado). De todas maneras, el acuerdo para intercambiar datos con Argentina incluyó algunas salvaguardas para Uruguay, como ser que el fisco no podría pedir datos en forma retroactiva (es decir hacia atrás de la entrada en vigor del acuerdo), que no se admitirían inspectores del vecino país en el otro y que tampoco se podían pedir datos al barrer. De hecho, en los primeros meses de vigencia del convenio, Uruguay rechazó algunos pedidos de Argentina por esos motivos.

¿Golpe al mercado inmobiliario de EE.UU.?

¿Qué puede pasar con el mercado inmobiliario de Estados Unidos? Sardáns recordó que "los medios de EE.UU. están hablando del enlentecimiento en la venta de inmuebles. Es evidente el menor número de inversores extranjeros, lo cual es lógico. Con la apreciación del dólar y, como contrapartida, con la devaluación de sus monedas sumado a las caída de sus exportaciones, cuentan con muchos menos dólares para invertir. Esta nueva norma sin ninguna duda, será un catalizador para que muchos propietarios extranjeros de inmuebles terminen de tomar la decisión de venderlos antes de que sea demasiado tarde; en definitiva, ya no proveen el atractivo que tenían, el anonimato".
En cambio, Hernández, la responsable regional de Prodigy Network, dijo que tras la crisis de 2008 que afectó a buena parte del mundo, se configuró un "escenario en el que nada tiene renta segura y nada te cuida el bolsillo" por eso "los inmuebles terminan siendo un activo de salvaguarda con un rendimiento interesante".
La misma visión aportó la directora de Glanay, quien sostuvo que "si hoy le abris a un inversor un abanico de posibles inversiones, seguro lo que la da mayor rentabilidad y seguridad a su dinero con la situación económica que vivimos es apuntar a los ladrillos".
Manifestó que en las principales ciudades de Estados Unidos, como Miami donde más invierten los extranjeros, el valor de las propiedades sube o se mantiene, pero no baja. "Es algo seguro, como si tuvieras una caja de ahorro constante", agregó. Ambas asesoras inmobiliarias explicaron que en comparación con una inversión en ladrillos en la plaza local, Estados Unidos permite reducir los riesgos clásicos de los países emergentes como la volatilidad cambiaria y los variables costos fijos (como los salarios o los materiales).

lunes, 1 de febrero de 2016

Viviendas cerraron 2015 con precios estancados y se redujo capacidad de compra.

Pese a que los valores en dólares se mantuvieron, bajó la capacidad de adquirir inmuebles
Pese a algunas subas y bajas puntuales en el año, la dinámica general de los precios de la vivienda en la capital fue de estabilidad. Si bien algunos operadores hablan de descuentos significativos a la hora de concretar negocios por parte de los dueños de los inmuebles, los precios de oferta medidos en dólares dejaron atrás su empinado ritmo de aumento de los últimos años y se mantuvieron prácticamente sin cambios a lo largo de 2015. 

El Índice de Precios de Oferta de Vivienda en Montevideo de El Observador (IPOVM-EO) tuvo una baja de apenas 0,2% durante el último año. El indicador surge del relevamiento de la totalidad de los avisos activos al cierre de cada mes en los principales portales clasificados que operan en el país (ver pieza).

Si bien la baja no fue significativa, implicó un cambio en la dinámica que mantenían los precios de los inmuebles hasta 2014. Solo en el segundo semestre de ese año, el indicador de la Unidad de Análisis Económico de El Observador había subido 4,3% –la serie de datos inicia en abril de 2014, cuando empezó a realizarse el relevamiento–. Durante 2013, el precio efectivo del metro cuadrado al que se firmaron las compraventas había aumentado 15%.

Pero a diferencia de la última década, cuando la suba del precio de los inmuebles medidos en dólares se veía compensada por el fortalecimiento de la moneda uruguaya y el aumento acelerado del salario promedio, en el contexto actual, el mantenimiento de los precios en dólares durante el último año afectó fuertemente la capacidad de los hogares para acceder a una vivienda propia.

Si al precio de oferta de los inmuebles se lo evalúa en pesos constantes –descontando el efecto de la inflación–, se observa una suba de 12,8% durante 2015, muy lejos de la estabilidad que muestran al evaluarlos en dólares. Esta forma de analizar los precios guarda una mayor relación con la capacidad real de las familias para acceder a un inmueble debido a que la amplia mayoría de los hogares uruguayos percibe sus ingresos en moneda local y no en dólares. 

Si además se tiene en cuenta la evolución de los salarios durante el último año –que enlentecieron su ritmo de aumento a su menor tasa de los últimos 12 años–, se observa una caída en la capacidad de adquirir un inmueble de 11%. Esto es, por cada 100 metros cuadrados que un hogar promedio podía adquirir a fines de 2014 con el ingreso de un año, al finalizar el último año podía comprar 89.

Por barrios

Si bien medidos en dólares, los precios de oferta de los inmuebles en la capital cerraron el año estables, esta realidad es muy distinta entre los diferentes barrios relevados por El Observador.

De los 17 barrios de la capital considerados en el sondeo, nueve bajaron de precio, mientras que los restantes ocho se encarecieron.

El barrio en el cual los apartamentos subieron más de precio fue Jacinto Vera, con un incremento de 7,9% en dólares corrientes, que llevó el precio indicativo de un apartamento de 65 metros cuadrados a US$ 119.100. Otros barrios que también tuvieron una apreciación significativa en el precio de sus viviendas fueron Parque Rodó y Parque Batlle. 

En el primer caso, el aumento fue de 4,8%, con un precio alcanzado para una unidad de iguales características a las consideradas anteriormente, de US$ 166.300. En Parque Batlle el incremento fue de 3,1% y el precio llegó a US$ 166.600.

En el otro extremo, los barrios que más se abarataron a lo largo de 2015 fueron Ciudad Vieja, Carrasco y La Blanqueada. En Ciudad Vieja la baja fue de 5,6% en el precio promedio de oferta del metro cuadrado y el precio indicativo de un apartamento de 65 metros cuadrados cayó a US$ 115.400. En Carrasco el retroceso fue de 3,6% –a US$ 220 mil– y en La Blanqueada, de 3,5% –a US$ 137.900–.

Por su parte, Pocitos, el barrio que cuenta con una mayor oferta de inmuebles a la venta mantuvo sin cambios sus precios (-0,02%) y por un apartamento de iguales características los propietarios pedían US$ 183.900 en el promedio de los avisos clasificados al cierre del año.

Metodología 

La Unidad de Análisis Económico de El Observador captura mes a mes la totalidad de los avisos clasificados de los principales portales. Con ellos se elabora una base de datos de más de 20 mil registros mensuales que son depurados y agrupados en 17 barrios. Para conformar el indicador global de la capital se ponderan los barrios por su participación en el total de compraventas de 2013.